Otra de la ciudades que visitamos en nuestro viaje a Croacia fue Dubrovnik. Conocida como La Perla del Adriático, esta ciudad es una de las más turísticas del país. Quizás, eso fue lo que menos me gustó de ella, que está demasiado masificada, pero aún así merece la pena conocerla. La muralla que la rodea es impresionante, y darse un baño en sus acantilados con las vistas de la ciudad histórica no tiene precio.