Hacía mucho que no salía de casa sin mi BBcream, porque cuando una va cumpliendo años lo cierto es que es complicado verse bien con la cara lavada, a menos que tengas la piel de porcelana, que no es mi caso. Sin embargo, en las últimas semanas los días que he usado BBcream o maquillaje los cuento con los dedos de las manos y todo ha sido gracias a las sesiones de fotorrejuvenecimiento facial a las que me sometí meses atrás.
Ya os había contado en un post anterior que me estaba sometiendo a este tratamiento en el centro de estética Zaitez, en Santiago de Compostela y ahora que lo he terminado os puedo confirmar que estoy muy contenta con los resultados. Mis poros están mucho menos marcados y mi piel está más lisa, tersa y luminosa. Además, en mi escote tenía bastantes manchitas del sol y prácticamente han desaparecido, así que sin ningún tipo de duda repetiré con este tratamiento.
El tratamiento es un poco molesto, sobre todo a medida que van aumentando la intensidad, pero se aguanta sin ningún problema. En mi caso, para asegurarme de que el fotorrejuvenecimiento fuese efectivo, seguí al pie de la letra las instrucciones de mi esteticista y también utilicé el aceite y la crema de liposomas que ella me recomendó para complementar el tratamiento. Además hay que usar siempre protección solar del factor 50 y evitar los cosméticos que lleven ácidos. El precio por sesión y zona en Zaitez es de 30 euros.
Si tenéis más curiosidad sobre este tratamiento os dejo mi anterior post sobre el fotorrejuvenecimiento (AQUÍ).
Aquí estoy con la cara lavada, recién salida de la ducha, para que comprobéis los efectos del fotorrejuvenecimiento facial. Y como sé que me lo váis a preguntar os voy a decir mi edad, 42 años. ¿Cómo me veis la piel? ¿Os parece que ha funcionado?
También os dejo la oferta que tienen en estos momentos en Zaitez para celebrar su primer aniversario.
